CRONICAS CARIBEÑAS

Por: Javier Gargollo Enero 2008

Necian 2000

El otro día no se porque pero amanecí de un genio de los mil pericos, por alguna ignota razón no me aguantaba ni a mi mismo, debe ser eso que los gringos llaman “midlaif crisis”, o sea la crisis de la mediana edad, porque traducirlo como la crisis de la edad media suena como a epidemia de ratas; fue entonces cuando escuche esa voz interna que a todos nos habla alguna ves en la vida, afortunadamente esta ves no hablo por cobrar!!, --- es hora de cambiar --- me dijo mi voz interna sin mayores especificaciones.

No me dijo si cambiar dólares, cambiar de ropa, de velocidad o de país, así que para el tiempo que tenia disponible y revisando el dinero con el que contaba, decidí cambiar de luc; discretamente me enfile a la sección de cosméticos para caballeros del súper y con voz muy masculina le dije a la señorita que quería un tinte para el cabello…si escucho bien… ¡si el mió!! Bueno … lo poco que me queda!!-

Error garrafal!!… existen como 7 marcas desconocidas y cada una tiene como 27 colores diferentes que van desde el negro chapopote al amarillo pollito de Chernobyl; viendo mi perplejidad, la señorita me mostró un cartón con varios mechones ensartados así como fetiche Sioux, indicando los tonos de cabello, de esa manera y comparando frente a un espejo pude decidirme por uno, mi elección fue el tono “Bronces Balineses” de Mr Clairol.

Ya en mi casa y totalmente a solas, me dispuse a leer las instrucciones y aplicar el producto; colóquese los guantes y lentes protectores, aplíquese la botella A del tinte, espere diez minutos, aplique la botella B del reactivo, aguante la respiración…cuando el ardor penetre la segunda meninge o los animales domésticos a su alrededor empiecen a caer muertos, enjuague vigorosamente por diez minutos, seque y peine… listo, sencillísimo !. Que puede salir mal ??

Ay Guey !!.. al mirarme en el espejo entiendo porque le pusieron Bronces Balineses a este color, y es que seguramente hubiera sido un fiasco de mercado llamarle “Carnaval Gay” o “Maricón de Astillero”; ahora me puedo ver como un tropical Cachirulo o mas bien como si me hubieran dejado caer desde una escalera una estopa tiesa con tinte color caoba claro.

Como no me atrevía a salir así a la calle, estuve encerrado dos o tres días enfundado en una gorra que solo dejaba ver las patillas y al cabo de eso decidí raparme a coco y emigrar al Tibet, bueno eso es lo que hubiera preferido hacer pero solo logre raparme y esperar pacientemente la salida de mi nuevo cabello con la esperanza de no haber causado daños permanentes a mi cuero cabelludo y anexas.

Así que si antes de este penoso episodio la gente se atrevía a murmurar lo canoso que me veía a pesar de mi corta edad, ahora todo había cambiado y solo podrían comentar ¿Que la habrá pasado en la cabeza a eses pobre viejito pelón ? o mira, ahí va el abuelo del Dalai Lama !!

Pero por lo menos aprendí la lección… la próxima ves que escuche a mi voz interna que es hora de cambiar, cambiare de sillón y seguiré viendo el mismo programa de tele, y posiblemente ya no tenga que usar esta incomoda gorra o quizá ya me encuentre en el Tibet y solo cambiaré el tono de mi meditación OhhhhhhhhmmMMMMM!!.